La Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi) muestra que 51% de los hogares venezolanos vive en condiciones de pobreza, lo que implica un incremento de 10 puntos en apenas tres años.
La Encovi -un estudio nacional que se ha convertido en referencia ante la falta casi absoluta de información oficial actualizada- señala además que la esperanza de vida ha disminuido 3,5 años en promedio, un indicador de deterioro que solo se ha visto en países afectados por crisis violentas o estados de guerra, según la profesa Anitza Freitez, directora del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la Universidad Católica "Andrés Bello" (Ucab).
La encuesta Encovi es un esfuerzo compartido de las universidades Central de Venezuela (UCV), Católica "Andrés Bello" (Ucab) y "Simón Bolívar" (USB) con el fin de construir y divulgar un sistema de indicadores que permitan hacer seguimiento y, eventualmente, la elaboración de políticas públicas para enfrentar el fenómeno de la pobreza en sus distintas y amplias manifestaciones.
En esta ocasión, la Encovi se vincula con el diseño del "Plan País", presentado como propuesta programático de transición por el presidente de la Asamblea Nacional y mandatario interino de la República, Juan Guaidó, para comenzar a superar la crisis económica y social.
Entre los datos revelados por la profesora Freitez destaca el creciente deterioro de la prestación de servicios públicos, especialmente agua y electricidad. Estos elementos forman parte del conjunto que conforman la matriz de pobreza multidimensional, que trata de englobar de manera concreta las condiciones de vida de la población.
Rezago educativo
La profesora Freitez reveló datos muy preocupantes sobre la situación educativa del país, como una caída de 8 puntos en la cobertura desde 2015, aunque se mantiene en 70%. El nivel de la disminución de la escolaridad tiene consecuencias nefastas para la estabilidad social y económica del país.
La Encovi 2018 encontró que solo 50% de la población escolarizada asiste regularmente a los planteles por problemas de servicios públicos y transporte; no obstante, el dato más preocupante es que 35% de estos estudiantes dejan de ir a las aulas por falta de alimentos, en el hogar o en la escuela.
El estudio muestra que 26% de la población infantil y adolescente del país está en severo riesgo de exclusión escolar, y 16% corre peligro de rezago severo, ya que tiene dos o más sin asistir a clases.
Hambre hereje
La precariedad alimentaria tiene expresiones realmente dramáticas. Por ejemplo, entre 2015 y 2008, la mortalidad infantil ha aumentado 10 puntos, en línea con el escalamiento de la crisis social y económica. La profesora Anitza Freitez estima, con base en los datos, que entre 2017 y 2019 podrían registrarse aproximadamente 20.000 fallecimientos de niños menores de un año.
El 80% de los hogares del país registra algún nivel de inseguridad alimentaria, debido a que nueve de cada 10 familias indica que no tiene ingresos suficientes para adquirir una canasta alimentaria que garantice calidad nutricional.
La prioridad de los especialistas de las tres universidades comprometidas en la realización de la Encovi es ampliar la cobertura geográfica para medir con más precisión la realidad socio-económica en medios rurales.
PUBLICADO: 27 de febrero de 2019