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Comenzó la hamburguerra

Además de las marcas tradicionales como McDonald's, Burger King y KFC, en los últimos doce meses han aparecido unas 90 compañías adicionales que comercializan hamburguesas al precio (y con la estrategia) que sea. La mayoría opera desde las llamadas "dark kitchens" o cocinas clandestinas, lo que ha traído consigo una batalla campal. El objetivo es claro: darle un buen mordisco a la torta. O mejor: al emparedado, como las llamaba el glotón Pilón 

 

Hamburguesas, pizzas y sushi. En ese orden. Son las tres opciones “más solicitadas” a los servicios de delivery. Y no solo en Caracas. En todo el país, según sondeos recientes de Yummy y PedidosYa, que lideran el sector de las entregas inmediatas.

Por eso se entiende que las marcas más tradicionales no solo no se hayan cruzado de brazos durante la pandemia sino que hayan reactivado sus mercados para tratar de sacar partido al asunto y ganarle al menos una partida a la crisis económica del país y poder surfear la ola hiperinflacionaria, que ya no es una ola y se ha convertido más bien en “un modo de vida”.  

Y hay más carne. Mucho más. Porque según Alfonso Riera, socio director de la firma Front Consulting Group, que es experta en implementación, desarrollo y comercialización de franquicias, son más de 90 las marcas de hamburguesas que nacieron entre enero de 2020 y febrero de 2021; 70 de las cuales están ubicadas en Caracas. Y todo ello lo que ha generado es una guerra por el liderazgo en las ventas. Una hamburguerra.

Así que mientras McDonald’s, que duela a quien duela está a la cabeza, promociona su  “Triple Cuarto Cheddard” a propósito del “Día Mundial de la Hamburguesa" y prepara un nuevo lanzamiento para la próxima semana, otros hacen fiesta con promociones de hasta de 2,5 dólares por el producto.

No importa que PedidosYa, la franquicia uruguaya de delivery con presencia en Venezuela, haya generado algo de ruido al adjudicar días atrás el primer lugar de las ventas a Burger Shack. Después a KFC. Y solo haya ubicado de tercero a la cadena estadounidense de restaurantes.

Un comportamiento que la compañía de delivery solo atribuye por cierto a Venezuela, pues en su estudio deja claro que en Argentina, Chile, Panamá, Ecuador y Perú el líder indiscutible de sus ventas es McDonald’s, a la que, por cierto, no parece hacerle ningún ruido el sondeo.

Y se entiende por varias razones. La primera: el ranking no toma en cuenta variables externas (por ejemplo, a sus competidores más cercanos como Yummy, Traetelo y Liveri), es decir, se limita a jerarquizar las marcas que distribuye individualmente con más frecuencia en los hogares venezolanos.

La segunda: Aunque ya tenía convenio con Traetelo, McDonald’s solo firmó su alianza con PedidosYa en junio de 2020, a diferencia de Burger Shack y KFC, que ya eran clientes habituales de la marca de entrega inmediata.

Y la tercera, dice Rafael Romero, gerente de comunicaciones de McDonald’s Venezuela: la marca no dependía antes ni depende ahora del delivery. Ni siquiera en pandemia, porque casi desde su nacimiento a mediados de los ochenta cuenta con una gran fortaleza que ya quisieran muchas: el servicio de Automac directo al automóvil, que como canal de ventas se adapta muy bien a las medidas de bioseguridad impuestas por causa del coronavirus: “distanciamiento social, entrega rápida, y ahora integrada a una aplicación (app)”. “Pero nuestro foco siguen siendo las tiendas… con su Auto Mac”, ataja él.

Queda claro que los verdaderos rivales de McDonald’s, presente hoy en 32 ciudades del país, y que está amparada por el paraguas de la transnacional Arcos Dorados que opera en más de 1.200 restaurantes en el mundo, son otros distintos. O los mismos de siempre. Al menos por volumen de ventas.

Burger King, que siempre ha tenido corona, se vio obligada en 2020 a cerrar buena parte de sus establecimientos en el interior del país para resistir a la crisis, pero sigue siendo la que le sigue los pasos a McDonald’s. Luego KFC, pese a que su producto estrella no son precisamente las hamburguesas sino el pollo. Y por supuesto, ahora Burger Shack, que ya cuenta con media docena de tiendas (siete de ellas en Caracas y el resto en Guarenas, Guatire, Valencia, Lechería y Puerto Ordaz). 

Solo después están entonces las demás: Burger Shack, Avila Burger y una larga lista de marcas que entran más bien en otra categoría: la de las “gourmet”, esto es, que añaden a su receta productos como champiñones, cebollas caramelizadas y hasta queso roquefort. Amén de pan artesanal y de batata. 

En esa lista resaltan sobre todo Araxi Burger, que hace poco más de una década inauguró una tienda en la urbanización Sebucán y hoy ya cuenta con réplicas en Las Mercedes, Santa Paula y el Centro Comercial Sambil.

Y más recientemente la cadena de bodegones Fresh Fish Delivery, cuyo foco principal siempre ha sido la distribución de productos del mar, solo que recién inauguró en el Centro Ciudad Comercial Tamanaco un establecimiento dedicado exclusivamente a la venta de hamburguesas. Y no solamente de pescado.   

Otro cantar es la Montserratina, que ha abierto locales igualmente en pandemia en Sambil, El Recreo, Paseo El Hatillo y Cerro Verde, sobre todo para posicionar su marca, especializada en embutidos, salchichas, chistorras y morcillas,  y de paso morder también un pedazo de la torta. O mejor: del emparedado.

Y lo dicho: a todas ellas hay que sumar ahora 90 nuevas marcas que nacieron entre enero de 2020 y febrero de 2021. 

Algunas fueron creadas como medio de subsistencia, es cierto. Pero otras ya habían planificado su modelo de negocio y el covid-19 simplemente se atravesó en el camino. La mayoría opera exclusivamente de forma digital desde las llamadas dark kitchens o cocinas personales y hasta clandestinas, esto es, “las ves en las redes sociales (sobre todo Instagram), te llaman la atención, preguntas el precio, las pides, las preparan en un apartamento o un galpón alquilado, y te las hacen llegar a través del delivery”,

Es el caso, por ejemplo, de Ruge, la marca que creó en plena cuarentena el chef, panadero y pastelero Juan Charbel Rugeles de hamburguesas de peso. Literalmente. Porque la más grande no pesa menos de 400 gramos, de los cuales 180 gr son de carne de punta trasera (molida y en tiritas)  hecha al grill. Y pan tipo brioche.

Como Mr. Burger y Mitos en Cabudare, en Barquisimeto. O como Urban Burger, que el cocinero, consultor gastronómico y foodie Ray Hevia creó también durante el confinamiento para repartir a domicilio hamburguesas con 150 gramos de carne de res premium, queso cheddar derretido, cebolla crispy y pan artesanal, y que resultaron tan exitosas que terminó poniéndole cuatro ruedas y ahora las comercializa con formato de food truck en distintos puntos de la ciudad.

Pero hay otras, advierte Alfonso Riera de Front Consulting, que han dado unos pasos adicionales: han alquilado un local y han abierto sus puertas al público con miras incluso a replicarlas según el modelo de franquicias. Como Foodies, que fue creada por el chef Enrique Augusto De Lima García en Barquisimeto, y ya tiene sede en Caracas, y que ofrece combos con papitas y refrescos nada menos que por 5,5$. Está claro que la guerra de hamburguesas apenas ha comenzado. 


PUBLICADO: 02 de junio de 2021