El lema se lee en mayúsculas: “Donde los opuestos se unen”. Parece una frase ingenua –utópica– en un país donde las diferencias políticas surgen hasta en la cola del supermercado. Pero es el eslogan de Contrapunto.com, que desde julio se abre paso en la selva digital.
Su presidente, el publicista Pavel Seidel, dice que “la idea es rescatar el periodismo equilibrado e informar sin extremismos”. Sus socios son el periodista Leo Felipe Campos y el creativo publicitario Daniel Salazar. Hablan de “una oportunidad de mercado en un país de extremos, con avidez informativa pero medios muy polarizados”. De allí “la importancia de un espacio para el encuentro”. La idea es buena.
Seidel es, además, VP ejecutivo de la agencia Nölck Red América, y dice que el país “ha crecido en el acceso a la web”. Un estudio de Tendencias Digtales sobre uso de Internet en Latinoamérica dice que Venezuela está de octava en la región con 45%. Pero si se considera el índice de uso –horas de conexión, transacciones electrónicas, páginas locales– el país está de primero con 89%.
Para competir pensaron en “una plataforma tecnológica robusta, un equipo de calidad y una publicidad con campañas disruptivas”, dice Seidel. Y su colega Yimmi Castillo, ex Ghersy, coordinador de Medios Sociales, resume: “No se trata de acabar con los impresos, ni de copiar y pegar noticias, ni de la versión web de un medio tradicional. Contrapunto.com nace, vive y respira el ADN digital”.
Quieren competir “con las dos páginas web de noticias más vistas en el país: Lapatilla.com y Noticias24.com”. Ambas, por cierto, ejemplo del periodismo polarizado que ellos critican. “Decimos que son nuestra competencia por su alcance en información general, pero venden sensacionalismo pop… nosotros apostamos a otra cosa”, dice el editor Campos.
Con 18 periodistas, Contrapunto replica otros medios y produce contenido propio: “me da pena decirlo, pero nuestra principal innovación es volver al periodismo sin partidismos políticos”. Sus modelos diferenciadores son The Huffington Posty The Guardian. Apunta alto.
Seidel cuenta que tienen estrategias pensadas para Instagram, Facebook y Twitter. A poco del lanzamiento, en Facebook tenía 1.309 Me gusta y 1.346 seguidores en Twitter (@contrapuntovzla). Lograrlos incluyó captar influenciadores entre gente relacionada con asuntos políticos. Lo novedoso del portal es la red social de noticias, única en el país. Castillo señala que es similar a Facebook o Google Plus, pero con énfasis en informaciones noticiosas: “Se crea un perfil y se ganan puntos por la interacción. Los de más puntaje por compartir datos son generadores de opinión y el contenido se hace más viral”.
El concepto se pensó hace un año. Empezaron a trabajar en marzo y lanzaron en julio. Hay 42 empleados. La oficina está en El Rosal. “No puedo dar un número exacto de inversión”, oculta Seidel. Tampoco revela a quienes captó como inversionistas. Pero es obvio que allí hay dinero. La redacción trabaja sobre plataforma Mac y no falta nada en tecnología.
Sobre el desafío de hacer periodismo en un contexto tan adverso como el venezolano, Seidel dice: “Si el medio excluye la versión oficial, es lógico que se cierren las puertas. Pero si hacemos una cobertura amplia, no debería haber ningún problema con el Gobierno”. Para Campos, elreto es ganar la confianza del público y convertirse en referencia: “Lo más difícil es que se abran las puertas con algunas fuentes. Aquí queremos hacer verdadero periodismo. No estamos para cuidarle el puesto a nadie y siempre habrá verdades incómodas”.
PUBLICADO: 17 de septiembre de 2014