El Banco Mundial estima que Colombia tendrá que cargar con un costo de USD 1.000 millones en inversiones en salud y educación en su área limítrofe con Venezuela para atender la demanda adicional de estos servicios que genera la creciente migración venezolana.
El ente multinacional publicó un reporte donde analiza el fenómeno de la migración venezolana en la región y concluye con un elemento positivo: en un plazo mediano, los venezolanos que ahora escapan de la crisis humanitaria que vive su país, terminarán por ser muy relevantes para la generación de crecimiento económico.
El análisis del banco estima que al menos 2 millones de venezolanos han salido del país desde 2015, con la particularidad de que esta masa de auto exiliados pertenece a estratos de medios y bajos recursos, por lo que un número creciente emigra en autobuses, e incluso a pie, haciendo largas y peligrosas travesías.
Colombia parece ser el país más directamente afectado, aunque ya hay quejas de Perú, Ecuador y Chile por el volumen de la migración venezolana. El Banco Mundial estima, tentativamente, que estos tres países deberán invertir una cantidad equivalente a los mismos USD 1.000 millones para atender a la población que sigue llegando.
Como "unas son de cal y otras de arena", el reporte del Banco Mundial señala que la migración masiva de Venezuela a Colombia impulsará el consumo y los ingresos fiscales resultantes podrían mejorar la economía de la nación vecina.
El compromiso de la administración del presidente Iván Duque es mantener una política de apoyo racional a los emigrantes venezolanos, pero ha sostenido en diversos escenarios que este es un problema de alcance regional, por lo que se deben tomar acciones concertadas para resolver la crisis venezolana.
En el plano político, Duque respalda la iniciativa del Grupo de Lima de denunciar a la administración Maduro por presuntos crímenes de Lesa Humanidad, ante la Corte Penal Internacional.
En su reseña sobre el reporte del BM, el diario El Tiempo de Bogotá apunta que "Basado en los datos recabados por las agencias oficiales colombianas, el informe señala que, a corte de septiembre, entre los 1,2 millones de personas que han llegado del otro lado de la frontera hay más de 300.000 colombianos que tuvieron que devolverse por la crisis. Esas cifras podrían ser muy superiores, dado el alto número de personas que deben haber entrado al país por pasos fronterizos no controlados.
Las estadísticas de Migración Colombia señalan que tan solo en los primeros meses de este año entraron para hacer tránsito hacia un tercer país 724.036 venezolanos. Además, hay 1,6 millones que tienen tarjetas de movilidad fronteriza (TMF) y que se mueven, a un ritmo de al menos 45.000 diarios, por la zona de frontera para buscar en Colombia alimentos, medicamentos y atención médica, pero que después retornan a su país".
PUBLICADO: 03 de noviembre de 2018