Según la OIT, más de 436 millones de empresas en todo el mundo podrían interrumpir su actividad, mientras que 1.600 millones de trabajadores de la economía informal - casi la mitad de la población activa mundial- corren peligro de perder sus fuentes de sustento.
De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la caída constante de las horas de trabajo en todo el mundo a causa del Covid-19, hace que 1.600 millones de trabajadores de la economía informal -casi la mitad de la población activa mundial- corra peligro inminente de perder sus fuentes de sustento
Asimismo, advierte el organismo que más de 436 millones de empresas en todo el mundo afrontan el grave riesgo de interrupción de la actividad. Estas empresas pertenecen a los sectores de la economía más afectados, incluidas unas 232 millones pertenecientes al comercio mayorista y minorista, 111 millones, a las manufacturas, 51 millones, a los servicios de alojamiento y servicios de comida, y 42 millones al sector inmobiliario y otras actividades comerciales.
Según El Observatorio de la OIT: El COVID-19 y el mundo del trabajo - Tercera edición, la caída de las horas de trabajo en el segundo trimestre de 2020, podría superar con creces a la estimada anteriormente.
En comparación con los niveles anteriores a la crisis (cuarto trimestre de 2019), la OIT prevé un deterioro del 10,5%, el equivalente a 305 millones de empleos a tiempo completo (asumiendo una semana laboral de 48 horas). Según la previsión anterior, el descenso sería del 6,7%, equivalente a 195 millones de empleados a tiempo completo. Ello se debe a la prolongación y la ampliación de las medidas de confinamiento.
Las estimaciones de la OIT indican una pérdida de horas de trabajo equivalente al 12,4% en el segundo trimestre en América (frente a los niveles anteriores a la crisis) y al 11,8% en Europa y Asia Central. Las estimaciones para el resto de los grupos regionales son muy cercanas, y todas superan el 9,5 %.
Repercusiones sobre la economía informal
Afirma la OIT que la crisis económica provocada por la pandemia, ha dado una estocada contundente a la capacidad adquisitiva de casi 1.600 millones de trabajadores de la economía informal (el grupo más vulnerable del mercado laboral), de un total de 2.000 millones a nivel mundial, y de una fuerza de trabajo mundial de 3.300 millones de personas. Son dos los desencadenantes: las medidas de confinamiento y/o el hecho de que esas personas trabajan en alguno de los sectores más golpeados.
Medidas políticas urgentes
La OIT insta a adoptar medidas urgentes, específicas y flexibles para ayudar a los trabajadores y las empresas, en particular a las empresas más pequeñas, los trabajadores de la economía informal y demás personas en situación de vulnerabilidad.
Indica que las medidas de reactivación de la economía deben basarse en un alto nivel de creación de empleo, y deben ser respaldadas por políticas e instituciones laborales más fuertes, y por sistemas de protección social más amplios y dotados de más recursos. Para que la recuperación sea efectiva y sostenible, también será decisiva la coordinación internacional de paquetes de medidas de estímulo y medidas de alivio de la deuda. Como marco, pueden utilizarse las normas internacionales del trabajo, que ya gozan de consenso tripartito.
Fuente: Organización Internacional del Trabajo
Foto destacada: Adri Marie en Pixabay
PUBLICADO: 03 de mayo de 2020