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#Escenarios Reconversión antes de agosto y salario mínimo de más BsS 150.000 para junio

Definitivamente, los aumentos del salario mínimo por decreto o "el factor de ajuste" del Petro, son combustible para la inflación y, de nuevo, los precios han escalado en promedios que van de 70% a 120% en alimentos y otras categorías básicas, con el agravante de que los niveles de abastecimiento siguen siendo precarios.

Esta situación lleva al economista César Aristimuño, presidente de la firma consultora Aristimuño, Herrera & Asociados, a predecir sin ápice de duda de que habrá otra reconversión monetaria a más tardar en agosto, ya que el país vivirá una inflación de no menos de 10.000.000%.

Aristimuño manifestó preocupación, porque la capacidad de ajuste que ha demostrado lo que queda del sector productivo privado es cada vez menor, porque estos incrementos de precios de bienes, fundamentalmente, presionan el consumo a la baja, por lo que los productores y comerciantes ajustan costos finales en mercados cada vez más pequeños.

Una nueva reconversión es casi un hecho, porque con el incremento del salario mínimo a BsS 18.000 el cono del bolívar "soberano" ha quedado ha prácticamente inutilizado, sostiene el especialista en Banca y Finanzas.

PRODUCTO conversó con dos gerentes de Recursos Humanos de empresas medianas, quienes indicaron que las proyecciones de sus empresas es que se produzcan no menos de dos incrementos más del salario mínimo en el primer semestre del año, de manera que si se aplica la misma tasa de aumento -300%- que utilizó el gobierno para el incremento más reciente, el ingreso básico podría ubicarse en BsS 162.000 para el mes de junio.

Este es simplemente un escenario, pero es indicativo de lo que están esperando las empresas que se están moviendo igualmente con cálculos de inflación que se ubican en alrededor de 300% mensual. La aceleración de los precios que se esta viendo en este mes de enero da una pista clara de lo que puede venir, dijo uno de los ejecutivos.

A pesar del decreto de inamovilidad hasta 2020 -que los ejecutivos consultados califican de perverso e inútil-, las nóminas van a seguir disminuyendo, porque las empresas no pueden dejar de ajustar personal, "y el gobierno lo sabe", sostuvo uno de los gerentes.

Lo que han hecho con este decreto -apunta- es hacer que los trabajadores exijan mucho más dinero para dejar los puestos de trabajo, porque el régimen prestacional que está previsto en la Ley del Trabajo ya no está vigente. Las empresas están comprando renuncias cada vez más caras, y lo seguirán haciendo. No hay más remedio.

Ambos ejecutivos sostienen que es necesario reducir nóminas entre 20% y 30% adicionales -porque ya se hicieron recortes en 2017 y 2018- para poder aguantar, porque los niveles de actividad son muy bajos y difícilmente se puede esperar una recuperación en el corto plazo.

Sin embargo, esas prácticas tiene límites, por lo que los gerentes consultados sostienen que en ambas organizaciones el escenario de la liquidación está presente, lo que causa una grave incertidumbre en los trabajadores.

Los trabajados entienden la situación -sostiene uno de los ejecutivos consultados- pero muchas veces hay que lidiar con la intransigencia de los sindicatos, muchos penetrados por el gobierno, que juegan a provocar la intervención, pero si se tiene una comunicación buena y permanente, es muy fácil lograr que los trabajadores no crean en esos cuentos, porque ya saben lo que pasa con las empresas públicas.

El otro ejecutivo apunta que es muy difícil lidiar con la desesperación que cunde entre los empleados. "Los días de pago son trágicos, porque la pregunta que se hacen los trabajadores cuando ven lo que se les deposita es; ¿qué puedo hacer yo con esto? Y uno no tiene respuesta para eso".

 

 

 

 

 


PUBLICADO: 18 de enero de 2019