Ya es costumbre que Venezuela aparezca en las listas más diversas de depauperación económica, institucional y mundial que se publican en el mundo. También se ha hecho costumbre que el gobierno niegue todos estos señalamientos, incluso los más serios y comprobables.
Anmistía Internacional, una de las instituciones más reconocidas en la defensa de los Derechos Humanos a escala internacional, publicó un informe este 20 de septiembre, donde indica que Venezuela es uno de los países más violentos del mundo, con una tasa de 89 homicidios por cada 100.000 habitantes, según datos recogidos en 2017.
Esta tasa de homicidios es la segunda más alta del mundo después de Siria, donde se registra una prolongada guerra civil, con intervención internacional.
La organización señala, además, que en el país no se castiga 90% de los homicidios, lo que configura una de las mayores tasas de impunidad de América Latina. El reporte titulado "Esto no es vida", apunta que la situación de la vigencia y respeto de los Derechos Humanos en el país es muy grave.
Según Amnistía Internacional, en Venezuela hubo 8.292 presuntas ejecuciones extrajudiciales entre 2015 y junio de 2017 y, además, 22% de los homicidios cometidos en 2016 fueron supuestamente ejecutados por "funcionarios de seguridad", que acabaron con las vidas de 4.667 personas.
El reporte de CNN en Español sobre informe de Amnistía Internacional señala que "Amnistía dice que ha podido identificar ´actuaciones de agentes del Estado venezolano que les atribuyen la responsabilidad sobre las altísimas tasas de homicidios del país´".
El informe de la organización defensora de los DDHH desarrolla una victimología de la violencia en Venezuela donde se destaca que 95% de las víctimas de asesinato en 2017 fueron hombres; 60% de las víctimas tenían un rango etario entre 12 y 29 años; más de 80% residentes en sectores populares; y más de 50% padres de niños pequeños y con estudios secundarios.
Aumenta el hambre, según la FAO
La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) reveló un informe donde señala que la escasez crónica de alimentos ha provocado que el grupo de venezolanos subalimentados haya pasado de 10,5% a 11,7% de la población, en la última década.
La más reciente edición del reporte "La seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo" apunta el deterioro de la condición nutricional de los venezolanos. Tiempos distintos estos a aquellos cuando esta misma organización premiaba al gobierno del ex presidente Hugo Chávez, por sus logros en el combate contra el hambre.
Según el informe, citado en el portal de la BBC, Venezuela no encabeza el ranking de países latinoamericanos con mayores niveles de desnutrición, sino que ocupa un poco honroso quinto lugar, detrás de Bolivia, con 19,8% de su población mal nutrida; Nicaragua, con 16,2%; y Guatemala, con un indicador de subalimentación de 15,8%. Honduras aparece en el cuarto puesto, con 15,3% de desnutrición.
No obstante, la FAO subraya que en la última década, la proporción de población subalimentada en Bolivia cayó de 30,3% a 19,8%, lo cual -todo hay que decirlo- es altamente encomiable.
Hay que decir que Cuba, Brasil y Uruguay aparecen como los países con menores índices de desnutrición en América Latina, con 2,5% de sus poblaciones en estado de subalimentación. Luego sigue Chile, con 3,3%. No se puede obviar tampoco el detalle que estos reportes se construyen sobre cifras oficiales, sobre todo para el caso de Cuba.
Venezuela, Belice y Jamaica son los únicos tres países de la región donde ha aumentado el hambre en América Latina y el Caribe, durante la última década.
PUBLICADO: 20 de septiembre de 2018