Las campañas en redes sociales se hacen cada vez más relevantes para las empresas y los medios son grandes "influencers". En Venezuela, aún sale muy barato vender las redes, pero las plataformas tradicionales no deben descuidarlas.
La inmediatez de las redes sociales en la difusión de la información ha jugado en contra de los medios impresos en muchas ocasiones, pero, en otras, han servido de puentes generacionales para captar nuevas audiencias y obtener importantes ganancias.
En un país en el que la migración a los entornos digitales se ha visto forzada por la escasez de papel, darle el sí a las redes sociales se puede traducir en ganancias por publicidad.
El problema básico en Venezuela es el establecimiento de tarifas. La mayoría de los medios están refiriendo a un tipo de cambio "de mercado" los precios que fijan a sus anunciantes; sin embargo, estos costos, si se comparan con los promedios internacionales, son extremadamente bajos.
Según pudo establecer PRODUCTO, la dispersión tarifaria en Venezuela es marcada, ya que una campaña en una red social, como Instagram, puede costar entre 30 y 200 dólares mensuales.
En el resto de América Latina tampoco parece haber parámetros serios sobre cuánto facturar en una red social y el tema se mantiene confidencial con mucho celo. En Europa, un post en Instagram, para una cuenta con un mínimo de 10.000 fans, cuesta entre 120 y 150 euros (entre 139 y174 dólares).
Si la cuenta garantiza un mínimo de 50.000 impresiones, el post en Instagram se cobra a 500 euros -580 dólares- y así el mercado avanza por escalas de influencia -número de seguidores- hasta los 2.500 euros o 2.900 dólares por post, según un trabajo publicado en el medio español, El Periódico.
Una campaña en Twitter o Facebook puede cobrarse por post entre 80 y 2.000 euros -entre 93 y 2.300 dólares- según el número de seguidores.
Los medios tradicionales se encuentran en un proceso de transición que, en Venezuela, ha sido forzoso debido a la escasez del papel. La migración a las páginas web es un hecho, y este cambio no necesariamente ha sido tranquilo u organizado. Se trata de la adaptación a un nuevo mundo lleno de términos, códigos y un ritmo propio que no se parece al de un medio impreso.
En el mar de nuevos conocimientos, hacer un uso inteligente de las redes sociales puede significar una fuente de ingresos importante.
Según Gaby Castellanos, experta en marketing y estratega publicitaria, las redes sociales son imprescindibles para un medio digital como fuente de información, herramienta de entendimiento y comunicación directa con su audiencia, mecanismo evaluación de reputación y credibilidad y –por supuesto- como una herramienta de generación de ingresos.
El tarifario en los medios nacionales que saltaron a los entornos digitales se actualiza mes a mes. El costo por publicar publicidad en las cuentas de Instagram de los principales medios digitales oscila entre 30 y 200 dólares mensuales, según el número de posta, por lo que una buena gestión de redes puede hacer la diferencia entre la supervivencia o no de un medio en los tiempos de crisis que vive el país.
Se trata de un cambio de enfoque en el que los lectores dejan de ser pasivos receptores de información, a socios que intervienen en el proceso creativo del medio, a través de sus comentarios y distintas formas de respuesta ante los contenidos publicados, lo que se traduce finalmente, en una mayor publicidad para el medio.
El nuevo pregonero
Las redes sociales pueden representar para los medios digitales, lo que el pregonero significaba para los impresos hace muchos años, como vendedores de las noticias.
La compañía española de Inteligencia Digital Divisadero, en su estudio Desafíos en Medios Sociales y Movilidad, asegura que los lectores de noticias en redes sociales aumentaron de 7% a 20% en el año 2013 y, desde entonces, el incremento ha sido consistentemente de entre 10% y 15% cada año, por lo que “una sólida y estratégica presencia social puede ayudar a mejorar la calidad y la cantidad del tráfico de referencia”, dice Castellanos.
La red “pesca” al lector que posteriormente entra en la web para buscar información y, en el camino, encuentra publicidad.
Ante el uso de los bloqueadores de avisos en páginas web, la mejor forma de asegurar que los lectores vean los anuncios, es generar tráfico en las web y he ahí la importancia de una buena gestión de redes.
A propósito, Castellanos enuncia una ecuación elemental: “a mayor audiencia, mayor negocio. A mayor entendimiento de la audiencia, mejor generación de ingresos”.
PUBLICADO: 03 de agosto de 2018