Samsung y Apple han hecho de la competencia entre fabricantes de smartphones una guerra abierta. Los spots publicitarios de ambas marcas han dejado de lado la sola mención de las ventajas de sus propios equipos, sino que han entrado de lleno en la comparación directa con los de su competidor, haciendo uso de la burla y el sarcasmo sin ningún límite.
El más reciente ejemplo es un comercial de Samsung, donde abiertamente se mofa del Iphone X, de Apple. La historia es directa y eficaz: una consumidora entra en una tienda de Apple, y mientras interactúa con un dispositivo Iphone X, pregunta a un joven empleado si la velocidad de descarga de ese modelo es superior a la del Galaxy S9, de la fabricante coreana. El empleado guarda silencio y pone cara de circunstancia.
Además, Samsung responde al slogan de Apple "Switch to Iphone" -Cámbiate a Iphone- con su "Upgrade to Galaxy" -Actualízate a Galaxy-.
Las hostilidades de esta guerra de spots recrudecieron en febrero pasado, en ocasión de la presentación del Galaxy S9 en el Mobile World Congress de Barcelona, España, cuando la ausente Apple lanzó una campaña con una serie de comerciales breves, donde no solo comparaba directamente las virtudes de sus equipos con los de su competidor, sino que también trataba de dejar mal parada a la estrategia de servicio al cliente de Samsung.
Más allá de la anécdota, hay un largo y antiguo debate sobre el uso de la publicidad comparativa, porque este tipo de práctica puede generar conflictos éticos, a menos que los productores comparen, sin manipular en perjuicio del consumidor, las ventajas de sus productos frente a las de sus competidores.
Este método de hacer publicidad se originó en Estados Unidos, en los años ´60, y sus primeros antecedentes importantes fueron las colosales batallas entre Burguer King y McDonald´s -básicamente por los tamaños de sus hamburguesas- y entre Coca Cola y Pepsi.
En algunos países, como Gran Bretaña, Alemania y Estados Unidos, la publicidad comparativa es de uso frecuente. En otros, como España, se usa de forma limitada y enmarcada en condiciones éticas muy precisas.
En América Latina, hay regulaciones en los diferentes mercados, como Chile, Colombia, Argentina, Brasil y México, donde la publicidad comparativa se permite siempre que no sea engañosa ni genere confusiones deliberadas en los consumidores.
¿Y quién está ganando la guerra?
Al cierre de 2017 se vendieron 1.500 millones de dispositivos móviles en el mundo, de los cuales 89,5% utiliza el sistema operativo Android; sin embargo, iOS, el sistema propietario de Apple, es actualizado de manera más rápida que el su competidor.
Android es utilizado por una variada gama de fabricantes, por lo que sus estadísticas de actualización son dispersas y se mueven en función del segmento de consumidores. Hay que destacar que los modelos Iphone son más exitosos en la gama alta del mercado.
En todo caso, Samsung resulta líder absoluto de mercado con una participación de 30%, según datos divulgados por ComputerHoy, correspondientes a 2017, mientras que Iphone se queda con una cuota de 16%; sin embargo, la publicación aclara que la coreana supera a la estadounidense por mucho en cantidad de lanzamientos anuales y se puede decir que dominan diferentes segmentos de usuarios.
Con información de MarketingDirecto.com y Economipedia.com
PUBLICADO: 19 de julio de 2018