Debido la decisión de un tribunal del estado Zulia de embargar por 106 millones de dólares sus activos, la automotriz que habría cumplido 70 años en el país en 2018, decidió cesará sus operaciones. Y tras su marcha no sólo quedará en vilo 55% de la industria de autopartes, sino la estela de casi 6 mil trabajadores desempleados.
A raíz del embargo que un tribunal del estado Zulia ordenó aplicar a una planta de General Motors en Venezuela, la empresa norteamericana anunció el cese de sus operaciones en el país. La medida que contempla incautación de 476 millardos de bolívares (106 millones de dólares) de los activos de la ensambladora y que además incluye algunos vehículos que ya fueron sacados de la planta y otros bienes, se tomó como resultado de una demanda interpuesta en año 2000 por la cancelación de una concesionaria debido a su ineficiente desempeño, explicó la empresa a través de un comunicado.
La acción que GMV calificó como carente de toda sustancia, conllevó –además- la toma de las instalaciones de la planta por la fuerza pública. “La incautación fue concedida y ejecutada en total desprecio del derecho a un debido proceso de GMV, causando daños irreparables a la empresa, a sus 2,778 trabajadores, a sus 79 distribuidores (la mayor red de servicios del país con más de 3,900 trabajadores) y a sus proveedores (más del 55% de la industria de autopartes en Venezuela)”, indica el comunicado.
La automotriz que dejó de ensamblar vehículos desde 2015 y que estaba dedicada a la venta de autopartes, no se plegó a la venta de unidades en dólares autorizada desde el año pasado por el gobierno, por considerar que dicha medida era poco viable y atractiva para un mercado tan deprimido como el venezolano.
La industria automotriz venezolana y su laberinto
Al igual que otras miles de empresas, la caída de la producción de automotriz está directamente vinculada a la crisis económica venezolana. El poco acceso a las divisas para importar materia prima y repuestos y la caída de la producción de Sidor -empresa que pasó de producir 4.8 millones de toneladas de acero, pasó a producir, según World Steel Association, 310.000 toneladas hasta el mes de noviembre de 2016- hizo que la industria que en su mejor año (2007) ensamblara 25.196 (*) vehículos, pasara a producir solo 240 en lo que va de año. (Leer Sector automotriz… o lo queda de él)
La empresa que en 2018 cumpliría 70 de presencia en el país, señala en su comunicado que garantizará el pago de los beneficios a los empleados afectados por la terminación de las operaciones de la fábrica, “en la medida que las autoridades lo permitan” y que seguirá prestando servicio a los propietarios de vehículos de la marca a través de su red de concesionarios. Asimismo, GMV rechazó enérgicamente las medidas arbitrarias adoptadas por las autoridades y se sumará a las otras empresas que han tomado medidas cautelares ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias (Ciadi) del Banco Mundial contra Venezuela, para defender sus derechos.
(*)Cifras de la Cámara Automotriz Venezolana
PUBLICADO: 21 de abril de 2017