Muchos se preguntan aún cuál es el mensaje –o mejor, los mensajes– detrás del espectacular aviso a doble página con la imagen del estratega venezolano Juan José Rendón (Jota Jota, para amigos y enemigos) publicado por el diario El Nacional, en su Edición 72 Aniversario de ayer, lunes 3 de agosto.
La edición se integró en 14 pequeños cuerpos para un total de 156 páginas: un récord en estos duros tiempos, sin acceso normal al papel y con anunciantes hostigados por la realidad. Los 2 primeros cuerpos constituyen el periódico "normal". Los otros 12 destacan a juicio del diario a Los Constructores de la Democracia. Pero salvo el primero, no tienen identificación particular y forman un todo. El aviso, reseñado ayer por PRODUCTO en su web, ocupó las páginas 6 y 7 en el mismo cuerpo que abre con la foto de Miguel Henrique Otero, hoy acosado por juicios y obligado a un rol de "editor itinerante", como explica su nota "Los que hacen la democracia".
El anuncio contiene tres propósitos comunicacionales claros:
a) Retar
b) Provocar
c) Hacer pensar
Y también cuatro mensajes con destinatarios bien definidos.
1. El primer mensaje Rendón se lo dedica a sí mismo. Una notable foto suya actúa como imagen –síntesis, con singular alarde de ego–. Y no es casual que, al menos por su tamaño, ese aviso sea el más importante de la edición que –en este momento tan particular del país– El Nacional dedica a "Los Constructores de la Democracia". Obviamente Rendón se auto define allí como constructor de democracia.
Además, como Jota Jota no puede vivir en Venezuela, el anuncio afirma: "recuérdales, como digo yo (que) la patria nunca esta lejos, está entre pecho y espalda". Lo que podría resultar también –sin que sea un disparate– un meta mensaje exagerado: la patria soy yo.
2. El segundo mensaje está en la página par y tiene como destinatario directo a Nicolás Maduro. Nadie ignora, porque hasta en sus cadenas nacionales lo da a entender el propio Presidente, que Rendón está entre sus peores enemigos. Y es obvio que esa foto de cuerpo entero de Jota Jota, enfundado en su vestimenta negra, con rostro sereno e impasible, no ofrece duda: quiere decir aquí estoy, literalmente de pie, vivo a pesar de todo.
3. La página impar contiene el tercer mensaje, que pareciera dedicado en directo a Henrique Capriles Radonsky, por el muy curioso uso del símbolo tricolor de su ultima campaña y la insistente repetición –por cuatro veces– de aquel eslogan electoral, "Venezuela somos todos", donde el entonces candidato –que "casi" gana– lució con virtudes inéditas, que no había mostrado antes ni volvió a mostrar después; y que la intelligenza política atribuyó al arte asesoral de Jota Jota, por entonces su principal mentor. Es obvio que hay un piquete allí. Quizá políticamente inútil, pero en todo caso muy humano.
4. El cuarto mensaje está en esa misma página y es para la MUD y el resto de los actores políticos, incluyendo al chavismo. Es un evidente llamado a la unidad, también envuelto en la resurrección del "Venezuela somos todos" y los consejos de la igualmente resurrecta estrategia de respeto e inclusión del adversario, inspirada en las ideas de politólogo Gene Sharp.
Pero mucho más enfático luce el mensaje en el titular final de pie de página: "La causa hoy es Venezuela". Allí parece haber un claro e irreverente planteo al interior de la MUD para que la dirigencia de los principales partidos deje de lado el enfrentamiento con lo que llaman "la derecha radical", entre cuyos referentes principales están hoy los más emblemáticos presos políticos de Venezuela. Con un tono –convengamos– algo escolar y por lo mismo irritante y retador, el aviso dogmatiza: "repeat after me: Venezuela somos todos". Y remata: "Si te gustan los partidos bien por ti (pero) guárdate tu militancia, guárdate tus personalismos (porque) Venezuela somos todos más allá del color y los partidos". ¿Puede estar envuelto en ese final un mensaje también para los militantes del PSUV? Tratándose de Jota Jota, es bastante probable, aunque parezca imposible.
Raúl Lotitto
PUBLICADO: 04 de agosto de 2015