El Banco Central Europeo publicó este lunes un comunicado en el que avanza que no ampliará la línea de liquidez de urgencia concedida a la banca griega.
El primer ministro de Grecia, AlexisTsipras, en vista de esa medida, tendrá que elaborar su propuesta para los acreedores europeos y lo hará bajo la presión que supone que las entidades financieras griegas, apresadas por el control de cambio, continúen casi sin recursos disponibles.
El consejo de gobierno del BCE, tras reunirse en videoconferencia, reconoció que sigue con detenimiento la situación de los mercados, pero no ampliará la línea de liquidez hasta que los bancos no tengan suficientes garantías para respaldar los préstamos de urgencia, o haya perspectivas de otro tramo de rescate a la vista.
Con la decisión, el BCE pretende obligar a Tsipras a impulsar reformas. El presidente francés, François Hollande, y la canciller alemana, Angela Merkel, aseguraron que la puerta del diáologo "sigue abierta", pero que le corresponde a Grecia presentar una "propuesta aceptable" para sus socios europeos.
"No queda mucho tiempo", dijo Hollande en referencia a la banca griega. Merkel destacó que "las condiciones para un nuevo programa todavía no se han dado".
PUBLICADO: 06 de julio de 2015