El tema no termina de ser formalizado, pero en todos los sectores se habla al respecto. Las versiones circulan sin que vocero alguno del Ejecutivo las confirme o las niegue. Así se van sumando los días y todo hace pensar que en efecto Ford Motors comenzará en julio la venta de automóviles en dólares, con lo que se darían los primeros pasos hacia un cambio en el mercado.
Solo algunos voceros del oficialismo se han pronunciado sobre el tema. Entre las principales reacciones se cuentan la de Ricardo Sanguino, presidente de la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional, para quien "hay que estudiar cómo esto va a afectar la presión sobre el dólar Simadi y el paralelo”; y la del también diputado Jesús Faría quien, tras aclarar que no conoce si en verdad existe un acuerdo entre el Gobierno y Ford, señaló que “actualmente no están dadas las condiciones de invertir en artículos que no son de primera necesidad, como lo son los automóviles”, por lo que se podría evaluar la posibilidad de que algunos sectores para mantenerse, y que disponen de esas divisas, tengan acceso sin acudir a los dólares primarios del Gobierno.
Incluso Sanguino destacó que “estamos en un momento donde no hay suficientes divisas para satisfacer requerimientos y necesidades del sector automotriz”.
Desde las filas del Ejecutivo solo se han producido unas declaraciones de Ricardo Menéndez, vicepresidente para la Planificación y el Conocimiento, quien se limitó a señalar que la única moneda de curso legal en Venezuela es el bolívar.
Venta en dólares por falta de dólares
A inicios de mayo se filtró la información, atribuida a “una fuente de la red de concesionarios de la marca, que pidió no ser identificada”, de que entre junio y julio comenzaría la venta en Venezuela de automóviles Ford en dólares como una forma de reactivar la planta de la empresa ubicada en el estado Carabobo y que desde abril estaba prácticamente paralizada.
El sindicato de trabajadores de Ford confirmó el inicio de estas operaciones y dijo que en julio se activará la venta en dólares de las primeras unidades de al menos tres modelos de esa marca.
La escasez de divisas que afecta a casi todos los sectores de la vida nacional sería el tema de fondo de estas “ventas en dólares”. De hecho los concesionarios de la marca Ford, ante esta coyuntura que impide el ingreso de los equipos necesarios para el ensamblaje en el país, estarían haciendo esfuerzos para reunir divisas para poder importar un primer cargamento de partes de la casa matriz del fabricante a fin de fabricar un pequeño lote de vehículos.
La casa matriz de Ford este año desincorporó a la filial venezolana de sus activos precisamente por las dificultades generadas por el tema cambiario y el impacto que esto tiene dentro de las cifras globales de la compañía.
Desde finales de 2013 en el país se inició un proceso que progresivamente hizo más y más restrictiva la asignación de divisas. En el caso de la industria automotriz este proceso produjo un declive sostenido en el ensamblaje de vehículos a niveles inferiores a los reportados durante el paro económico de 2003.
Sin embargo, la industria automotriz tiene una concentración importante de mano de obra, por lo que el riesgo de cierre de las ensambladoras puede tener fuertes repercusiones a nivel nacional. El sector emplea, de forma directa e indirecta, a cerca de 100 mil personas. Solo la planta de Ford en Valencia cuenta con una nómina de más de 2 mil 300 trabajadores.
PUBLICADO: 19 de mayo de 2015