Lil Nas ha logrado su cometido. Y un poco más, a decir verdad. El rapero estadounidense, cuyo verdadero nombre es Montero Lamar Hill, ha puesto a miles –seguramente millones- de personas a hablar acerca de él y sus nuevas zapatillas deportivas que, además de algunas referencias satánicas, tienen una gota de sangre. Unas zapatillas que la compañía estadounidense de equipamiento deportivo Nike ha decidido demandar.
Nike, la compañía estadounidense dedicada al diseño, fabricación y comercialización de equipamiento deportivo, ha demandado al colectivo artístico MSCHF por las zapatillas deportivas que ha confeccionado para el rapero Lil Nas, quien acaba de ganar dos Grammys por su tema Old Town Road.
Se trata de una serie limitada de calzado a la que el cantautor, cuyo nombre verdadero es Montero Lamar Hil, ha bautizado como “Satan Shoes” (Los zapatos de Satán) porque ha sido decorada con una estrella invertida de cinco puntas, una referencia bíblica (Lucas 10:18) y una gota de sangre.
Solo que hay un detalle: Los zapatos son unos Nike Air Max 97 intervenidos por el colectivo artístico MSCHF, que se especializa en comercializar en la red productos de ediciones limitadas. Y nadie le pidió autorización a Nike, que ahora pide se suspenda la la entrega de los pares que fueron totalmente vendidos el lunes, por la escalofriante cifra de 1.018 dólares.
También demanda dinero por perjuicios e intereses pero no especificó la cantidad en cuestión. Nike dice que ese modelo es una fuente de confusiones y la ha expuesto a sufrir un posible boicot.
La línea de calzado de Lil Nas no es más que la nueva respuesta del cantautor a quienes lo enviaron al infierno y amenazaron a través de las redes social con arder en las llamas eternas luego de que diera a conocer públicamente en julio de 2019 que es homosexual.
Una descarga de homofobia a la que Montero Lamar respondió primero con el videoclip de Montero (Cal me by your name), en el que el mismo despierta en el jardín del Edén, bajo un árbol gigante, y es visitado por la serpiente del pecado.
PUBLICADO: 30 de marzo de 2021