Joaquín Salvador Lavado, el dibujante latinoamericano más conocido en el mundo gracias a Mafalda, falleció la semana pasada en su ciudad natal, Mendoza. Quino deja a su hija contestataria al cuidado de millones de seguidores que la adoptaron como suya, haciéndola inmortal como ahora lo es su creador.
Mafalda, la más contestaria de las luchadoras sociales de todos los tiempos, quedó huérfana. Su creador, Joaquín Salvador Lavado “Quino”, falleció a los 88 años de edad en su Mendoza natal. El padre de Mafalda venía padeciendo desde hacía varios años de dificultades de movilidad y de visión debido a un glaucoma. Durante los años noventa había tenido que someterse a diversas operaciones quirúrgicas.
Quino, considerado hoy por hoy como el caricaturista más universal en idioma español, ingresó a la Escuela de Bellas Artes a los 13 años de edad, pero en 1949, a los 17, se obstinó de dibujar jarrones y abandonó la academia para perseguir lo que consideró que podía ser su única profesión posible: dibujante de historietas y humorista. “El día que publiqué mi primera página – dijo recordando sus inicios en el semanario Esto Es, de Buenos Aires – pasé el momento más feliz de mi vida”. Eso fue en 1954 y desde entonces sus dibujos humorísticos se han publicado ininterrumpidamente en infinidad de diarios y revistas de América Latina y Europa.
En 1963, Quino publicó su primer libro: “Mundo Quino”, con una recopilación de dibujos de humor gráfico con prólogo del humorista, escritor, dibujante y editor argentino Miguel Brascó, quien lo puso en contacto con 
Agens Publicidad, para dibujar la campaña de la línea de electrodomésticos Mansfield. El nombre de algunos de los personajes debía comenzar con la letra M, de donde surge Mafalda. Finalmente, la agencia no desarrolló la campaña, pero Quino se quedó con algunas tiras que le sirvieron unos meses después para dar vida al personaje que lo haría inmortal.
Joaquín Salvador Lavado publicó la primera entrega de Mafalda el 29 de septiembre de 1964, en el semanario Primera Plana de Buenos Aires. Seis meses más tarde, se la llevó al periódico El Mundo, donde publicaba seis tiras por semana, iniciando así el indetenible éxito del personaje, que terminó por conquistar toda Latinoamérica y poco después Europa, con la edición en Italia del libro “Mafalda la Contestataria” en 1969, con presentación de Umberto Eco, director de la colección. La serie de historietas ha sido traducida a unos 30 idiomas.
Mafalda por siempre
A pesar de su éxito y fama internacional, Quino decidió no dibujar más tiras de Mafalda en junio 1973, pues ya no sentía la necesidad de utilizar la estructura expresiva de las tiras en secuencia. "Me costaba mucho esfuerzo no repetirme, sufría con cada entrega”, dijo en ese momento. “Cuando uno tapa el último cuadrito de una historieta y ya sabe cuál va a ser el final es porque la cosa no va. Y por respeto a los lectores y a mis personajes, y por mi manera de sentir el trabajo, decidí no hacerla más y seguir con el humor que nunca dejé de hacer". Se dedicó entonces a desarrollar historias con personajes anónimos del quehacer diario que dibujaban sin tapujos su ácida visión del mundo y de la vida.
Por esa misma época, el Canal 11 de Buenos Aires presentó una serie de cortos animados con los personajes de la tira de Quino, producidos por Daniel Mallo, y que fue el germen de “Mafalda, la película”, dirigida por Carlos Márquez y producida por Mallo con las animaciones de Jorge Martín (Catú). El largometraje animado se estrenó en Buenos Aires en 1981.
Así pues, el interés por el personaje no mermó: sus libros continúan reimprimiéndose y Mafalda sigue siendo elegida para acompañar las campañas sociales de instituciones como UNICEF, la Cruz Roja Española y el Ministerio de Relaciones Exteriores de la República de Argentina.
En 1993, la empresa española D.G. Producciones S. A., en coproducción con Televisiones Españolas, produjo 104 episodios de Mafalda en dibujos animados de 1 minuto de duración, bajo la batuta del director de cine de animación Juan Padrón, en el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos, ICAIC. Las caricaturas se difundieron en Italia por la RAI2 y en Argentina en dos oportunidades: primero por el antiguo canal 11 y varios años después por canal Encuentro.
Independientemente del cese de las tiras de Mafalda, Quino continuó publicando semanalmente sus conocidas páginas de sátiras que luego agruparía en la colección de sus libros de humor.
En 2006 dejó de dibujar regularmente. En el año 2017, tras la muerte de su esposa, Alicia Colombo, Quino regresó a Mendoza donde la muerte cobarde lo sorprendió prácticamente ciego y sin un lápiz para defenderse.
Mafalda queda huérfana, pero con una gran familia universal.
PUBLICADO: 02 de octubre de 2020